¿Has leído el libro Elogio del cientificismo?
Te lo recomiendo. Es de editorial Laetoli y recopila escritos de varios autores importantes.
Los términos "cientificismo" o "cientificista" utilizados como insulto o para descalificar, constituyen una caricatura, una falacia espantapájaro.
Por ejemplo, ningún auténtico cientificista afirma que la ciencia es el único conocimiento válido. Sería absurdo. Pero frecuentemente le atribuyen tal exabrupto. Y hasta el DRAE trae esa definición.
Dicho de mejor forma: la humanidad ha aprendido diversos modos o métodos de conocer el mundo. Y a lo largo de los siglos ha seguido aprendiendo y mejorando. Pues bien, desde el siglo XIX llamamos "ciencia" a lo mejor que hemos logrado en ese aprendizaje.
Lo consideramos mejor por su creciente poder explicativo y predictivo, por su cada vez mayor rigurosidad (lógica y experimental) y precisión, por su exponencial potencial tecnológico, por su claridad, transparencia y enseñabilidad (su carácter abierto, exotérico, así, con x), por su constante progreso, por su creciente independencia de factores subjetivos (en lo cognitivo, no en lo ético), por la creciente integración de sus componentes. Y también por la cosmovisión que nos ha brindado, la más amplia, la de mayor escala en la historia de la humanidad. Una cosmovisión que se puede expresar en forma narrativa épica como Gran Historia o Big History (en este blog hay varias entradas sobre este tema).
Por eso, cuando me llaman "cientificista", respondo: gracias.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Sigue las reglas de la argumentación racional