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martes, julio 13, 2021

Pensamiento de un sector juvenil en Barranquilla 2021



DEBATE SOBRE COLÓN Y EL PATRIMONIO CULTURAL 

Discusión sobre la destrucción de la estatua de Colón en Barranquilla hace un par de semanas.


Para lectores que no conozcan a Barranquilla: ésta es una ciudad puerto, moderna, de un millón y medio de habitantes y un área metropolitana conurbada.  No fue fundada por conquistadores, sino por el pueblo mestizo, criollo.  Es reconocida en la historia como "sitio de libres" en contraste con ciudades coloniales como Cartagena y Santa Marta.  No hubo aquí una élite esclavista o aristocrática ligada a la tierra sino una élite de comerciantes e industriales, irrigada por una inmigración cosmopolita, como la colonia italiana que donó la estatua en 1892.  Esta ciudad es un crisol de mestizaje, no es ciudad de etnias o conflictos étnicos, aunque no me cabe duda de que hay racismo supérstite disimulado.

Este evento se realizó aproximadamente una semana después de los hechos y en el lugar de los hechos.  Asistieron unas 60 personas, la mayoría jóvenes menores de 25 años.  Yo participé como invitado para sustentar la posición crítica al hecho destructivo y simbólico, como parte de un panel integrado también por otras tres personas. Sumando las intervenciones del público hubo en total unas 15 personas exponiendo opiniones durante dos horas (mis intervenciones sumarían quizás unos 20 minutos).  La deliberación fue respetuosa, sin abucheos ni comités de aplausos.

Mi objetivo fue escuchar de viva voz el pensamiento de estos jóvenes activistas y expresar ideas críticas externas al discurso decolonial que tiende a predominar en algunos sectores como éste.  En este escrito me concentro en lo que ellos dijeron, no en mis tesis.  Hago una síntesis en 27 puntos de las intervenciones individuales que escuché, lo que no significa que todos estuvieran de acuerdo con todo.  No se puede asegurar que haya unanimidad total entre ellos, pero sí hay en términos generales sintonía con un discurso que se puede caracterizar como decolonial, indigenista o afín.  Esta cuasi-unanimidad se evidencia en que prácticamente no hubo debate entre ellos sino con las tesis que logré sustentar brevemente.  No peco de inmodestia al decir que si yo no hubiese asistido el evento habría sido un monólogo.  Esto es así porque el grupo organizador me invitó precisamente por eso, ya que esta discusión presencial fue precedida por el debate en redes y yo acepté el reto del debate presencial.  

Suele suceder que los académicos no se atreven a salir de su torre de marfil y asumir el debate político, a pesar de que las ideas que circulan en las universidades, especialmente en facultades de sociales o humanidades, están profundamente imbricadas con la dinámica política de la sociedad.  Por mi parte, pienso lo contrario de los académicos acomodados, las ideas deben salir a la calle, al ágora de la polis, para decirlo en un lenguaje pseudoerudito que place a los académicos.  Eso es producto de mi historia de vida que ha sido precisamente antiacadémica, aunque irónicamente me encuentre vinculado laboralmente a este sector durante los últimos tiempos.      


SÍNTESIS DE PENSAMIENTOS EXPRESADOS

Los siguientes son los puntos de vista o intentos argumentativos expresados por integrantes del sector juvenil que está de acuerdo con la acción realizada.    

1.       El valor artístico y estético de la estatua es despreciable y además obedece a una estética nazi

2.      Se puede criticar a Char por abandono al patrimonio cultural de la ciudad y al mismo tiempo atentar contra ese patrimonio

3.       El notorio contraste entre Barranquilla y Popayán es irrelevante (maximalismo)

4.    La diferencia entre la historia de la estatua de Belalcázar en Popayán y la historia de la estatua de Colón en Barranquilla es irrelevante  (maximalismo)

5.       El relato de ciudad pionera, moderna y cosmopolita no cala, no tiene mayor aceptación

6.       La memoria urbana no parece ser importante para ellos

7.       A mayor lejanía en el tiempo y en el espacio se les hace más importante la historia (la de hace 500 en el continente es más importante que la de hace 200 en el país y mucho más que la de hace 100 en la localidad)

8.       El sentido de pertenencia con la ciudad lo percibo en un nivel muy bajo (sería interesante verificar procedencia de los jóvenes, sus padres y abuelos, buscarle explicación al fenómeno)

9.        La acción tiene como motivo alegado expresar solidaridad con indígenas como un "acto simbólico de reparación"

10.   El accionar de los jóvenes Misak es asumido como representativo de más de 80 etnias indígenas que hay en Colombia

11.   Un grupo de un centenar de jóvenes activistas sí es representativo de la ciudad, es democracia en las calles, no se necesitaba consulta previa (vanguardismo) (la ausencia del comunicado explicativo fue un fallo circunstancial dicen)

12.   Es válido igualarse al oponente, por ejemplo responder a la antidemocracia del gobierno con la antidemocracia de los activistas (toma de decisiones sin consultar a la ciudadanía)

13.   Aceptación de la estatua durante 130 años no cuenta, tampoco el respeto a la colonia italiana

14.   Creen que la acción no genera rechazo, no perjudica la valoración del Paro por la opinión pública y no beneficia a la derecha políticamente  (metidos en su burbuja)

15.   La dimensión histórica de Colón es un asunto irrelevante (el navegante explorador no les interesa ni el impacto histórico multidimensional)

16.   Creen que la leyenda rosa es aún hegemónica y por tanto hay que confrontarla (verbos muy usados: visibilizar, resignificar) (¿qué historiografía leen?)  (falacia espantapájaro o punching bag)

17.   La historiografía marxista, la de la escuela de los anales, la "Nueva Historia" en Colombia y en general la historiografía seria les resulta desconocida al parecer

18.   Eludieron la crítica a la idealización de los indígenas (los comportamientos anteriores a la llegada de europeos que son moralmente criticables desde la moral actual; las alianzas de indígenas con europeos en contra de sus opresores también indígenas, las acciones indígenas durante la guerra)

19.   Los hechos históricos son falseados en dirección a una leyenda negra hiperexagerada (un ejemplo es el desconocimiento del papel de los gérmenes como causante de la mayor parte de la mortandad; otro desfase es atribuirle a Colón eventuales hechos posteriores a su muerte en 1506)

20.   La conquista no es vista como una guerra geopolítica con todas sus complejidades sino simplemente como genocidio y robo unilateral: la visión ético-jurídica anacrónica y maniqueísta opaca todo análisis político – militar o de procesos socioeconómicos.  La moral individual de Colón (u otros protagonistas) es sometida a un juicio extemporáneo con la moral de hoy y los conceptos jurídicos de hoy.

21.   El llamado a una visión histórica como procesos sociales objetivos, sin anacronismos, moralismos o maniqueísmos, es simplemente desatendido (queda la duda sobre la enseñanza de la historia en colegios y por tanto en la formación de maestros de historia o sociales en Uniatlántico)

22.   No encuentran falacia alguna en una analogía entre Colón y los indígenas con el caso de Hitler y los judíos

23.   La idea de un “nosotros” indigenista desconoce el mestizaje, la ascendencia española, las inmigraciones e historias de 500 años; es como si “nosotros” fuésemos los indígenas de 1500 (error que también le he escuchado a la divulgadora Diana Uribe)

24.   Se minimiza la importancia de la independencia de España hasta un valor casi nulo

25.   Frente a los héroes de la independencia Bolívar aún es valorado (por ahora se salva), no así Santander y Nariño (el antisantanderismo en Colombia es viejo, pero ¿y Nariño?)

26.   La idea de progreso como un valor no cala, no es apreciada, no cuenta

27.   La memoria (subjetiva) es enfrentada y preferida a la historia (objetiva) y es extendida más allá de cualquier memoria humana.  De hecho es aplicada 5 siglos en el pasado (nuevamente el tema de visibilizar y resignificar)


Como referencia he aquí un resumen de mis argumentos en seis puntos:

1.       Defiendo la cultura y el arte sin censura.

2.       Defiendo la memoria histórica, colectiva y urbana de Barranquilla.

3.       Defiendo la toma democrática de decisiones en la comunidad (ciudad en este caso).

4.       No apoyo acciones que pudieran ser aprovechadas por la derecha para desacreditar el Paro ante la opinión pública o en la perspectiva electoral de 2022.

5.       Estoy en desacuerdo con la manipulación ideológica del pasado, sea leyenda rosa, blanca o negra; frente a ello defiendo la historiografía científica.  En este punto ubicado en las ciencias sociales rechazo el maniqueísmo, el moralismo y el anacronismo como formas de aproximación a la historia.

6.       En el campo filosófico soy crítico del posmodernismo y sus derivados, mientras que defiendo la filosofía científica.  Este punto es pertinente porque sostengo que el posmodernismo está detrás del pensamiento decolonial y éste, como ya dije, está en el meollo del discurso que defiende la acción que se debate.  (Esta tesis no se pudo desarrollar). Esta crítica es ontológica (contra el idealismo) y es epistemológica (contra el subjetivismo, el ultrarrelativismo y el irracionalismo).

 

 ¿Quedaría la semilla de algunas inquietudes y cuestionamientos?

 

El Búho, julio de 2021

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